La Pura y Limpia del Postigo se trasladó al Monasterio de la Encarnación en una mañana radiante

La imagen de la Pura y Limpia del Postigo del Aceite se trasladó en la jornada de ayer domingo, 27 de noviembre, desde su sede canónica al Monasterio de la Encarnación de la Plaza Virgen de los Reyes, para celebrar sus cultos de regla.

Este traslado, que se desarrolló a partir de las doce del mediodía,resultando brillante tanto por la propia procesión como por el ambiente que la rodeo. 

La Virgen procesionó en su paso procesional, que es el complemento perfecto a una imagen coronada, con un exorno floral a base de varios centros de antirrinum.

El cortejo estuvo formado: por Cruz Alzada, un tramo de hermanos con cirios, Estandarte corporativo, presidencia, cuerpo de acólitos y paso procesional.

Javier Díaz Espinosa fue el capataz que comandó la cuadrilla de costaleros que portó a la Virgen, que demostró su buen hacer al frente de este paso que presenta dificultades "técnicas" por su tamaño y peso. Además, todas la "levantás" fueron a pulso. Especialmente complicada fue la salida desde la pequeña capilla que tiene esta Corporación gloriosa en el Postigo del Aceite y sin hacerlo de rodillas.  

Chat de Pasión por Andalucía: